17 noviembre, 2007

Cómplice

Mi corazón se detuvo en el desfiladero de los ojos, vistieron plumas de cuervo en mi piel y sus voces licuosas descendieron por la tráquea. Mi sangre graznaba como quien devora una palabra en un sorbo de café sin latidos. Yo leía.

“Si, Ahora es noche cerrada en las montañas. Estoy dentro de la cabeza de la mujer, mirando a través de los agujeros de su cráneo, oyendo el silencio…” Silencio dice Bradbury.

Veo a una virgen en duelo navegando en mares muertos. Ella recita: La idiotez del hombre llegó hasta la cerviz del infierno. No merecen una tumba digna. Los gusanos harán su trabajo.

Y me muestra su daga.

Le ofrezco una taza de cafè.

Dark Crystal © 2007

6 comentarios:

Polux dijo...

Cons uerte alguine camina sólo en medio de los cuentos, pero comunmente, la gente siempre los está leyendo.
es divertido pasearse solo...

Nadie te ofrese café.


saludos

Manux dijo...

los gusanos haran su trabajo!!! lo malo es que lo hacen cuando la carne ya esta muerta, si lo pudieran hacer antes, ya me hubiera encargado de uno que otro infeliz mortal.
saludos negros

Anónimo dijo...

Exquisito.

Un beso Crystal.

Unknown dijo...

eres una persona muy siniestra, me agradas regresa pronto...

yo regresaré siempre... como la noche.

Cletus Qasidy dijo...

mirando atravez de los agujeros de su craneo, que imagen, me recordo algo y temble de miedo

♦♦♦sol☼de☼soles♦♦♦ dijo...

Alguien escribió que eres muy siniestra, confirma la regla de que no todo lo que reluce es oro ni todo lo que se dice oscuro lo es...sigo en la espectativa de tus letras.
Que el Cristal asome nuestros rostros.